Introducción.
El cuento que he escogido para esta actividad es “Hansel
y Gretel”, es un cuento folclórico al que le tengo mucho cariño ya
que me lo contaba mi madre de pequeña y por eso, es mi preferido.
La versión que he leído para preparar la actividad es la de los hermanos Grimm,
grandes recopiladores de cuentos folclóricos. Los hermanos Grimm tienen dos características que diferencian los
suyos de otros cuentos adaptados, se caracterizan por una visión optimista muy
marcada y un proceso muy sencillo de identificación con el héroe.
Debido a su carácter folclórico, he considerado que la
estrategia más adecuada para narrar este cuento es la técnica del
cuentacuentos.
Recordemos, que los cuentos folclóricos fueron creados y
transmitidos de forma oral durante siglos, por lo que creo fundamental no
perder esta característica. Por otra parte, con esta técnica se crea una
conexión especial entre el narrador y los oyentes, se capta la atención del
oyente de manera natural y embaucadora, se crea un ambiente mágico y permite
dar rienda suelta a la imaginación.
La edad a la que dirigiría el cuentacuentos sería para niños
de 4 años, ya que el alimento literario
de este periodo es el cuento folclórico y además el cuento para 4 años puede
liberarse de la imagen en el momento de la narración, pues no la necesita. Será
la palabra del narrador la que haga que el niño visualice las imágenes del
cuento.
En definitiva, el cuento de Hansel y Gretel es adecuado para narrarlo a niños de 4 años mediante la técnica
del cuentacuentos por las siguientes razones:
- Es
un cuento folclórico.
- Con
cuatro años, el cuento puede liberarse de la imagen.
- El
relato es sencillo, de estructura lineal, con planteamiento, nudo y
desenlace feliz.
- Es una
historia tradicional, que contiene encanto y una chispa de magia, como por
ejemplo, la bruja o que exista una casita de chocolate.
- Hay
un personaje que entraña peligro, la bruja , aspecto que entusiasma en
esta edad.
- Hay
personajes niños, Hansel y Gretel, que se encuentran alejados de su padre
y madrastra, algo que también les sugiere interés a los lectores de esta
etapa.
- El
cuento permite realizar pausas, formular preguntas, que los niños
participen ,etc.
Aquí os dejo el cuento de Hansel y Gretel para aquellas
personas que no lo conozcan.
Hansel y Gretel vivían con su padre, un pobre leñador, y su
cruel madrastra, muy cerca de un espeso bosque. Vivían con muchísima escasez, y
como ya no les alcanzaba para poder comer los cuatro, deberían plantearse el
problema y tratar de darle una buena solución.
Una noche, creyendo que los niños estaban dormidos, la cruel
madrastra dijo al leñador:
-No hay bastante comida para todos: mañana llevaremos a los niños a la parte
más espesa del bosque y los dejaremos allí. Ellos no podrán encontrar el camino
a casa y así nos desprenderemos de esa carga.
Al principio, el padre se opuso rotundamente a tener en
cuenta la cruel idea de la malvada mujer.
-¿Cómo vamos a abandonar a mis hijos a la suerte de Dios,
quizás sean atacados por los animales del bosque? -gritó enojado.
-De cualquier manera, así moriremos todos de hambre -dijo la
madrastra y no descansó hasta convencerlo al débil hombre, de llevar adelante
el malévolo plan que se había trazado.
Mientras tanto los niños, que en realidad no estaban
dormidos, escucharon toda la conversación. Gretel lloraba amargamente, pero
Hansel la consolaba.
-No llores, querida hermanita-decía él-, yo tengo una idea
para encontrar el camino de regreso a casa.
A la mañana siguiente, cuando salieron para el bosque, la
madrastra les dio a cada uno de los niños un pedazo de pan.
-No deben comer este pan antes del almuerzo -les dijo-. Eso
es todo lo que tendrán para el día.
El dominado y débil padre y la madrastra los acompañaron a
adentrarse en el bosque. Cuando penetraron en la espesura, los niños se
quedaron atrás, y Hansel, haciendo migas de su pan, las fue dejando caer con
disimulo para tener señales que les permitieran luego regresar a casa.
Los padres los llevaron muy adentro del bosque y les
dijeron:
-Quédense aquí hasta que vengamos a buscarlos.
Hansel y Gretel hicieron lo que sus padres habían ordenado,
pues creyeron que cambiarían de opinión y volverían por ellos. Pero cuando se
acercaba la noche y los niños vieron que sus padres no aparecían, trataron de
encontrar el camino de regreso.
Desgraciadamente, los pájaros se habían comido
las migas que marcaban el camino. Toda la noche anduvieron por el bosque con
mucho temor observando las miradas, observando el brillo de los ojos de las
fieras, y a cada paso se perdían más en aquella espesura.
Al amanecer, casi muertos de miedo y de hambre, los niños
vieron un pájaro blanco que volaba frente a ellos y que para animarlos a seguir
adelante les aleteaba en señal amistosa. Siguiendo el vuelo de aquel pájaro
encontraron una casita construida toda de panes, dulces, bombones y otras
confituras muy sabrosas.
Los niños, con un apetito terrible, corrieron hasta la rara
casita, pero antes de que pudieran dar un mordisco a los riquísimos dulces, una
bruja los detuvo.
La casa estaba hecha para atraer a los niños y cuando estos
se encontraban en su poder, la bruja los mataba y los cocinaba para comérselos.
Como Hansel estaba muy delgadito, la bruja lo encerró en una
jaula y allí lo alimentaba con ricos y sustanciosos manjares para engordarlo.
Mientras tanto, Gretel tenía que hacer los trabajos más pesados y sólo tenía
cáscaras de cangrejos para comer.
Un día, la bruja decidió que Hansel estaba ya listo para ser
comido y ordenó a Gretel que preparara una enorme cacerola de agua para
cocinarlo.
-Primero -dijo la bruja-, vamos a ver el horno que yo prendí
para hacer pan. Entra tú primero, Gretel, y fíjate si está bien caliente como
para hornear.
En realidad la bruja pensaba cerrar la puerta del horno una
vez que Gretel estuviera dentro para cocinarla a ella también. Pero Gretel hizo
como que no entendía lo que la bruja decía.
-Yo no sé. ¿Cómo entro? -preguntó Gretel.
-Tonta-dijo la bruja,- mira cómo se hace -y la bruja metió
la cabeza dentro del horno. Rápidamente Gretel la empujó dentro del horno y
cerró la puerta.
Gretel puso en libertad a Hansel. Antes de irse, los dos
niños se llenaron los bolsillos de perlas y piedras preciosas del tesoro de la
bruja.
Los niños huyeron del bosque hasta llegar a orillas de un
inmenso lago que parecía imposible de atravesar.
Por fin, un hermoso cisne
blanco compadeciéndose de ellos, les ofreció pasarlos a la otra orilla. Con
gran alegría los niños encontraron a su padre allí. Éste había sufrido mucho
durante la ausencia de los niños y los había buscado por todas partes, e
incluso les contó acerca de la muerte de la cruel madrastra.
Dejando caer los tesoros a los pies de su padre, los niños
se arrojaron en sus brazos. Así juntos olvidaron todos los malos momentos que
habían pasado y supieron que lo más importante en la vida es estar junto a los
seres a quienes se ama, y siguieron viviendo felices y ricos para siempre.
Preparación de la actividad.
Para preparame esta activad, me leí el cuento de”Hansel y
Gretel” para recordarlo y a continuación lo narré en voz alta frente al espejo
un par de veces, y lo entoné como creí
conveniente. He optado por un narrador cercano, y he decidido
enfatizar lo siguiente:
- La
voz dulce de Gretel.
- La
voz irritante de la madrastra.
- La desesperación
de los niños cuando ven que están solos en el bosque.
- El
desenlace ( encuentran su casa y ven a su padre)
Después pensé en qué pausas realizar y qué preguntas introducir
para implicar a los espectadores en el relato, que sinceramente me fueron
saliendo solas a medida que iba contando el cuento, un ejemplo de pregunta fue
en el momento en el que se quedan solos en el bosque, otro cuando encuentran la
casita de chocolate.
Continué por pensar en
una introducción para el cuento
con un ¨ Había una vez…¨
Antes de empezar sería conveniente también hacer una serie
de preguntas para ponerles en contexto. Por ejemplo, preguntándoles si han
escuchado este cuento alguna vez, si
saben quiénes son Hansel y Gretel, si han visto alguna vez una casita de
chocolate…etc
Y finalmente elegí un cierre para el cuento que
consistiría en: ¨Colorín, colorado, este cuento ha terminado¨.
Al realizar la actividad frente mis compañeras del primer grupo, señalaron que debía improvisar
sobre la marcha si algún detalle se me olvidaba
y mirar a las dos, ya que sin darme cuenta estuve contando el cuento
para una persona.
Después volví a contar el cuento al segundo grupo, aquí fue
mejor que la primera vez e intenté mejorar lo que me habían dicho en el primer
grupo, y así fue ya que, sus comentarios no fueron los mismos, me dijeron que
les había gustado mucho como lo había contado en cuanto a interpretación y
entonación, pero una de ellas me dijo que le parecía más correcto si quitaba la
muerte de la bruja, cosa que personalmente, no estoy de acuerdo, ya que es un
tema que no hay que omitir, que aparecen en casi todos los cuentos y con no
hacer hincapié en ello, es suficiente.
Finalmente, hice lo mismo con un último grupo. Aquí me encontré con que no
tenían ningún comentario digamos ¨negativo¨ o a mejorar, simplemente me dijeron
que la entonación y los gestos lo hacían especial.
Tras reflexionar sobre éstos aspectos, pensé también en
llevar material externo al aula, como un teatro descargable para contar el
cuento de Hansel y Gretel o el que se quiera.
Así habrá doble emoción: contarlo y montarlo. Consta de seis
fondos y de personajes.
Os dejo el enlace para descargarlo:
Ha sido una experiencia muy agradable, me ha gustado mucho poder escuchar a mis compañeras, porque de
cada una aprendes algo y te fijas en algo bueno para tenerlo en cuenta más
tarde.
La verdad es que me he sentido a gusto con esta actividad y aunque
siempre al principio da un pelín de corte, me he sentido tranquila. Seguramente,
estando frente a los niños, me sueltes
más, te cohíbes menos y no tienes a
nadie que esté pendiente de ti cada segundo, porque más tarde te vayan a
evaluar, comentar etc.
Este taller me ha servido para ver que soy capaz de hacer un
cuentacuentos, y para ver que falta mucha práctica a pesar de que los
resultados han ido bien.
Me ha servido para aprender de las demás, escuchar y
aceptar opiniones de otras compañeras, ya que hay detalles, que pasan
desapercibidos, y no te das cuenta hasta que no te los dicen y obviamente también
sirvió para disfrutar de ello.
Interactuación con los niños.
Anteriormente, he mencionado que en clase cuando hice el cuentacuentos realicé una serie de preguntas al principio y durante el cuento.
Ahora voy a decir algunos aspectos que tendría en cuenta a la hora de realizarlo ante niños.
Interactuación con los niños.
Anteriormente, he mencionado que en clase cuando hice el cuentacuentos realicé una serie de preguntas al principio y durante el cuento.
Ahora voy a decir algunos aspectos que tendría en cuenta a la hora de realizarlo ante niños.
Lo primero que tendría que decidir es qué historia contar.
Después me disfrazaría de un personaje que guiará a los niños a lo largo de la historia ayudándoles a soñar.
También es importante crear un espacio para la historia. Tenemos que conseguir captar su atención desde el primer momento. Actuar es lo más importante para mantener su atención y conseguir que entiendan todo lo que queremos transmitirles. Cambiaría la voz en función de los personajes que aparezcan. Subiría y bajaría el tono cuando sea necesario.
Preguntarles a menudo sería otro aspecto importante. Se podría hacer con que has olvidado algún dato de la historia para que te corrijan, o preguntarles qué creen ellos que harían los personajes.
Una vez terminado el cuento, sería conveniente dialogar con ellos sobre el cuento o algunos aspectos que les hayan llamado la atención y quieran conocer más sobre ello, ya que es un punto importantísimo.
Referencias.
Apuntes Irune.